Miguel Indurain preparó el asalto al 5º Tour de manera tranquila, sin correr ni Giro ni Vuelta a España. El fiasco en el Giro de 1994 y el paso de los años, habían sido las razones principales para ceñirse exclusivamente al Tour de Francia de 1995.
Indurain cada vez encontraba más rivales y de mayor categoría. Entre los rivales importantes se encontraban Tony Rominger, que venía de ganar el Giro de Italia o Eugeni Berzin, que le arrebató el Giro de 1994 a Miguel y había quedado en 2º lugar este mismo año. Bjarne Riis que corría en el mismo equipo que Berzin, era otro rival a tener en cuenta ya que año tras año iba a más.
A diferencia de otras ediciones en la prólogo hubo sorpresas, al ponerse a llover a mitad de carrera y los favoritos que salían los últimos salieron perjudicados. La siguiente crono importante era por equipos, donde destacó el equipo Gewiss de Berzin y Riis, por delante del siempre especialista equipo ONCE. Sigue leyendo